lunes, 30 de enero de 2012

De vuelta a la rutina.

El miércoles pasado regresé a casa después de haber estado con los mios durante 11 días enteritos, resultándome algo difícil el viaje, ya que cada vez que vuelvo mi abuela está un poco más mayor, y eso hace que se me parta el corazón cada vez que tengo que hacer el camino inverso una vez que he ido a verla y estar con ella.

El día 20 fue su cumpleaños, y el domingo anterior toda la familia le hizo una fiesta sorpresa para celebrarlo por adelantado, ya que al siguiente muchos miembros no podían acudir por diversos motivos, así que celebramos su 88 cumpleaños todos juntos con una comida muy buena que hizo el padrino Juan Luis, y una tarta más buena aún que hace exquisita la madrina Susana, y si encima le añadimos que estábamos todos en el campo disfrutando de un día espléndido ya no se puede pedir más ^_^

Mi abuela es la única "mayor" que queda en nuestra familia así que por eso la cuidamos más aún que antes. Está bastante bien, vive sola y hace todas sus cosas ella misma, aunque cada vez le va costando más, pero va a hacerse su compra a la tienda que tiene cerquita de casa, va al mercado con su vecina Cari que la cuida muy bien, ya que todos los días se pasa un rato por la tarde-noche a verla antes de ir a su trabajo, cuando hace alguna comida que a ella le gusta le da un plato de comida...., cosas que solo hace la familia, o los vecinos de antes, pues ahora casi todo el mundo vive metido en piso sin apenas conocer o ver a quienes viven en el mismo edificio.

Mi abuela vive en una planta baja, en una zona de casitas familiares de las que ya quedan pocas en Cartagena, pues como todo crece, el tamaño de las casas también lo hace convirtiéndose en edificios.

Supongo que el vivir en una planta baja es lo que le da vida, pues para salir a la calle tan solo tiene que abrir su puerta y salir al exterior, sin tener que bajar un montón de escalones que le dificultarían mucho su salida al exterior como ocurre con muchos mayores la verdad, y es que no nos damos cuenta de que ahora somos jóvenes, pero llegará el día en que ya no podamos hacer ciertas cosas con la misma soltura que ahora.....

El caso es que durante esos 11 días que he estado por allí, salvo los que Neska estuvo mala (tres días), el resto los he pasado yendo con ella de aquí para allá, llevándola a comer fuera casi todos los días, a sus lugares favoritos, a los sitios donde ella iba cuando era joven, cuando era pequeña, cuando se casó, cuando tuvo a sus dos hijos, cuando fue abuela y nos llevaba a mi hermano y a mi....., todo ello le ha dado mucha vida, le ha dado recuerdo que creía olvidados, y mientras paseábamos por aquí y por allí me iba contando lo que hacia en ese sitio cuando estaba allí, lo que había antes de ser como es ahora, y es increíble lo mucho que han cambiado ciertas cosas, lo diferente que son, o como han vuelto a dejar algo como era mucho antes de que yo naciera, ya que también a veces los de arriba se dan cuenta que hay cosas que no deben cambiar nunca, unas para no olvidar, y otras para recordar.

En fin, que han sido dos semanas geniales, y las he podido compartir con la persona que más quiero en el universo, pues mi abuela es genial, siempre se ha portado muy bien conmigo, y siempre me ha querido tanto o más (creo que más, pues para eso es abuela jejeje) que yo a ella, por eso ahora que está mayor me doy cuenta de que estoy lejos, muy lejos de ella, y he decidido que cuando pueda voy a irme otra vez a casa a trabajar allí, si no en Cartagena, si en una ciudad más cercana ahora, pues en estos momentos se me hace imposible ir más a menudo de lo que me gustaría a verla, y aunque hablo con ella todas las noches para ver cómo está, qué ha hecho durante el día, contarle el mio y darle una ultima conversación y "compañía" durante el día, lo cierto es que la echo de menos, y mucho, echo de menos sus comidas, su compañía, sus "broncas", todo lo que hago con ella, así que estoy deseando por una parte que pase rápido este año y parte del que viene (antes no creo que pueda trasladarme a vivir otra vez cerca de ella), con la esperanza de poder ir a casa de nuevo, y de que ella siga viva, y como está ahora, pues aunque solo pudiera estar un solo día a su lado, aunque fuera allí y ella al día siguiente se fuera....., habrá merecido la pena.

Si, es triste, pero todos nos iremos un día u otro, unos antes, otros después, y yo quiero que mi abuela esté bien cuidada antes de que eso pase, y aunque cometí el error de cambiar mi lugar de trabajo antes de hablar con ella y ver como estaba pensando egoístamente en mi y donde estaría mejor cerca de donde vivo (me encanta donde vivo y mi nuevo puesto de trabajo), ahora creo que ha llegado el momento de devolverle lo mucho que ella me ha dado a mi a lo largo de toda mi vida, de toda su vida conmigo, desde que yo nací, pues al fin y al cabo es lo que nos vamos a llevar, lo que nos va a quedar después de que nuestro familiar nos deje, y son nuestros recuerdos, y yo quiero aumentarlos mientras ella aún esté aquí.....

Lo único que me alegra ahora mismo es que ya viene el buen tiempo, y eso a ella le da mucha vida, pues sale más a la calle, el sol alarga los días, y la temperatura es mejor para ella, así que al menos sé que cuando hace buen tiempo ella está bien, y también lo sé porque tiene una vecina como las de antes, como cuando yo era peque, que todos nos conocíamos en nuestra calle, cosa que hoy en día no pasa, pues muchas veces ya tienes suerte si conoces a quien vive puerta con puerta contigo......, y eso es algo odioso y tedioso de las ciudades, el anónimato, que por una parte es bueno, y la soledad que ello conlleva, lo que no es nada bueno en la sociedad en la que vivimos, pues cuanta más gente hay en ella...., más sola se siente esta.....



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