jueves, 9 de diciembre de 2010

Cambio de aires.

La semana pasada hice algunas gestiones en mi trabajo para cambiar de puesto dentro de la empresa, además de lugar de trabajo, es decir, de sede.

Por suerte me informaron de que podía realizar una entrevista el martes, lo que me vino muy bien, ya que al tener puente no trabajaba y pude desplazarme a la sede donde quiero trabajar para realizar la entrevista, la cual me salió bastante bien, ya que nada más llegar el compañero que me atendió fue muy amable e hizo que mis nervios se fueran, así que al entrar a la entrevista con los jefes todos los nervios acumulados antes de llegar al edificio se esfumaron en unos segundos.

La reunión duró unos quince o veinte minutos, durante los cuales me preguntaron porque creía que debían cogerme, y  si tenía pensado quedarme allí o marcharme en breve, ya que no quieren perder el tiempo formando a alguien que en breve se marcharía a otra de las sedes que tiene la empresa en otros lugares.

También me preguntaron por mi experiencia, como pensaba desempeñar mi puesto de trabajo, que intereses tenía, si me había informado sobre el mismo, y que me habían dicho, comunicándome los entrevistadores (y futuros jefes) que todo era correcto, además de ampliar la información que había recibido.

Lo que más me gustó de todo fue el ambiente relajado que se respiraba en el lugar de trabajo desde el principio, además de la distancia-cercanía de los jefes, pues se mostraban cercanos respondiendo a mis preguntas, a la vez que lejanos manteniendo esa distancia que todo jefe debe tener a mi parecer con sus subordinados.

Creo que no fue mal, ya que se quedaron con mis datos, y me informaron de los pasos a dar para poder hacerme un hueco y trabajar con ellos, así que esta mañana nada más llegar he hablado con mi jefe actual (al cual ya le había comunicado mis planes), y además de darme mi instancia solicitando un puesto en la sede que me interesa, le he pedido que me de el visto bueno para poder marcharme, respondiéndome afirmativamente (como hizo la primera vez que le hablé de ello), por lo que todo el papeleo para poder continuar con mi crecimiento personal y profesional ha continuado.

A ver cuanto tiempo tardo en cumplir otro de mis sueños e ir al puesto soñado desde hace tiempo.

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